El AYUNO. pt. 1 - Previo al llamado ''ORACIÓN Y AYUNO 2011'' del 27 al 30 de Nov.

Como muchos ya vieron en el wall de HORIZONTE en facebook, nos estaremos sumando a miles de creyentes en Jesucristo, en mas de 24 países, a partir del 27 de Noviembre, hasta el 30 del mismo mes.

Y creo oportuno compartir una serie de recursos que nos ayudarán a prepararnos para tales días.

Por lo que de aquí a tal fecha, estaré publicando ''posts'' referentes a ello. Y empezaremos tocando el tema del AYUNO (en 2 partes, hoy la 1).

Nuestro Señor Jesucristo plantea en repetidas partes de la Biblia que el ayunar es un ejercicio en que cada persona de la iglesia debe participar por cierto periodo de tiempo. El no hablaba de ''si ayunas...'', sino ''cuando ayunes'', checa los siguientes versículos:

Mat. 6:16-18 Cuando ayunéis, no seáis austeros, como los hipócritas; porque ellos demudan sus rostros para mostrar a los hombres que ayunan; de cierto os digo que ya tienen su recompensa.Pero tú, cuando ayunes, unge tu cabeza y lava tu rostro para no mostrar a los hombres que ayunas, sino a tu Padre que está en secreto; y tu Padre que ve en lo secreto te recompensará en público.

Isaías en el Nuevo Testamente, retó al pueblo de Dios a tener una perspectiva correcto con respecto al ayuno:

Isa. 58:4 He aquí que para contiendas y debates ayunáis y para herir con el puño inicuamente; no ayunéis como hoy, para que vuestra voz sea oída en lo alto.

¿Es tal el ayuno que yo escogí, que de día aflija el hombre su alma, que incline su cabeza como junco, y haga cama de cilicio y de ceniza? ¿Llamaréis esto ayuno, y día agradable a Jehová?¿No es más bien el ayuno que yo escogí, desatar las ligaduras de impiedad, soltar las cargas de opresión, y dejar ir libres a los quebrantados, y que rompáis todo yugo?. ¿No es que partas tu pan con el hambriento, y a los pobres errantes albergues en casa; que cuando veas al desnudo, lo cubras, y no te escondas de tu hermano?. Entonces nacerá tu luz como el alba, y tu salvación se dejará ver pronto; e irá tu justicia delante de ti, y la gloria de Jehová será tu retaguardia.

Ayunar es una disciplina espiritual en la que uno se ''desasocia'' a si mismo de ''deseos naturales'' de la carne, y provee una oportunidad de enfocar su atención en buscar la dirección de Dios en su vida, la de los suyos y en su caso la de la iglesia.

Cómo empezar a ayunar

1. Marca un objetivo

Por qué estás ayunando? Es por una renovación espiritual, por guía, por sanidad, por solución de problemas, por una gracia especial para manejar una situación difícil? Pídele al Espíritu Santo que clarifique Su guía y objetivo para tu tiempo de oración y ayuno. Esto te permitirá orar de un modo mas estratégico y específico.

2. Comprométete 

Ora acerca del tipo de ayuno en que te involucrarás.

• Cuánto tiempo? - una comida, un día, 5 días, una semana?
• El tipo de ayuno que Dios quiere que tengas - solo agua; agua y jugos; ''la dieta de Daniel'' (solo vegetales); o ayunar de algún deseo como televisión, deporte (si tu no haces deporte de por sí, eso no es ayuno eh!, y necesitas hacerlo... jajaja), antojos, medios electrónicos, algún hobbie, etc...
• De qué actividad física o social te restringirás?
• Cuánto tiempo cada día dedicarás a orar y a la Palabra de Dios?

Haciendo estos compromisos, bien orados y definidos con tiempo, ayudarán de manera sustanciosa, para el momento del ayuno cuando las tentaciones físicas o de hábitos de la vida nos tienten a abandonar o rendirnos.

3. Prepárate Espiritualmente

El fundamento base del ayuno y la oración, es el arrepentimiento. EL pecado no confesado y el no arrepentimiento, traba y estorba nuestras oraciones.

Salmo 66:18 - Si en mi corazón hubiese yo mirado la iniquidad, el Señor no me habría escuchado.

Aquí te pongo algunas cosas que puedas hacer para preparar tu corazón:

• Confiesa todo tu pecado, todo aquello que sabes y/o que el Espíritu Santo te haga ver que existe en ti, y recuerda y recibe el perdón de nuestro Dios. (1a Jn. 1:9).
• Procura y pide el perdón a todo aquel que hayas ofendido, y perdona a todo aquel que te ofendió. (Mat. 11:25/Luc. 11:4 y 17:3,4).
• Rinde TODA tu vida al señorío de Jesucristo; rechaza y renuncia a todo naturaleza mundana. (Rom. 12:1,2).
• Comienza tu jornada de oración y ayuno con un corazón expectante. (Heb. 11:6).
• No subestimes oposición espiritual. Satanás algunas veces intencificará los ataques para estimular una mas fuerte batalla entre la carne y el espíritu. (Gal. 5:16,17).

Ok. Creo que es suficiente por hoy, la próxima semana veremos cómo prepararte físicamente y otros detalles para que podamos sacar el máximo provecho de esta jornada con nuestro Dios.

Abrazo.